Un inquietante secuestro tuvo lugar en El Carmen, Nuevo León, donde una pareja de repartidores de comida fue víctima de un ataque violento por parte de un grupo armado. Los hechos, que han generado gran preocupación en la comunidad, fueron captados por cámaras de seguridad en la zona, proporcionando evidencia crucial para la investigación en curso que lleva a cabo la Fiscalía General de Justicia.
Captura del momento del secuestro
Las imágenes registradas en el cruce de las calles Río Ramos y Arroyo San Miguel, en la Colonia El Jaral, muestran el momento exacto en que una mujer, quien trabaja como repartidora, baja de una motocicleta con una caja que utiliza para entregar pedidos. Su compañero la esperaba en la unidad, lo que sugiere que estaban llevando a cabo una entrega regular. Todo parecía proceder con normalidad hasta que la mujer se disponía a regresar a la motocicleta.
En ese instante, dos camionetas aparecieron de forma repentina, bloqueando el paso del motociclista. De las unidades descendieron varios hombres armados, quienes rápidamente sometieron a la pareja. Las imágenes muestran cómo, a pesar de su resistencia, ambos fueron forzados a abordar las camionetas antes de que los delincuentes huyeran del lugar. La motocicleta de las víctimas quedó abandonada en el sitio, un triste recordatorio de la violencia que ha aumentado en la región.
Reacción de las autoridades
El suceso suscitó una respuesta inmediata por parte de las autoridades locales. La Fiscalía General de Justicia de Nuevo León inició una investigación para esclarecer los hechos y dar con los responsables del secuestro. Se están analizando las grabaciones de las cámaras de seguridad y otros posibles datos que puedan aportar información sobre el paradero de los delincuentes y el estado de los repartidores.
Este incidente resalta la creciente preocupación por la seguridad en el área, particularmente para aquellos que trabajan en servicios de entrega, que son cada vez más vulnerables a ataques. La comunidad ha expresado su temor ante la posibilidad de que tales actos de violencia se repitan, lo que pone de manifiesto la necesidad de medidas más efectivas para proteger a los trabajadores en el sector.
Las autoridades también han hecho un llamado a la ciudadanía para que, si poseen información sobre el paradero de los repartidores o sobre los delincuentes, se comuniquen con las líneas de emergencia.
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